martes, 13 de abril de 2010

Las golosinas que ganaron al olvido "pelean" por volver a los quioscos

Aporte realizado por la alumna Mariela Lavazza

"Que vuelvan las golosinas de antes", exigen cientos de personas desde un grupo de Facebook que pide el regreso de aquellos nostálgicos dulces que, para la tristeza de muchos, abandonaron los kioscos, los carritos de las plazas o el cajón de acomodadores del cine, una especie en vías de extinción.

Las redes sociales invitan a los usuarios fanáticos de los dulces de antaño a relamerse con melancolía, recordando aquellas golosinas que más se extrañan e intentando quizá volver, aunque sea por un ratito, al patio de la primaria.

Por qué desaparecieron las golosinas que eran un boom
"El mercado de golosinas se basa bastante en novedades. En los últimos tiempos los ciclos de vida de los productos son más cortos. Antes uno lanzaba un producto y si ese producto pegaba, duraba años. Hoy es un mercado tan dinámico que las empresas van relanzando nuevos productos constantemente. Se hace difícil lograr que algo se instale y dure años", explicó Ricardo Lorenzo, gerente de Gestión de la Asociación Distribuidores Golosinas y Afines, a Infobae.com

"Hay una tendencia a un 'revival' en todos los aspectos. Por la nostalgia y el recuerdo, todos tratan de volver a las cosas de años pasados. Esto se da en la música también. Se está tratando de reflotar éxitos de años anteriores. En el consumo de golosinas pasa lo mismo”, consideró.

Para muchos las golosinas ya no son lo que eran. Al respecto, Lorenzo señaló que, si bien es "bastante subjetivo" determinar esas cuestiones, es cierto que "hay productos que han tenido algunos cambios en el sabor y lo han hecho de acuerdo a la evolución de los hábitos".

"A veces por aquel concepto de que 'el tiempo pasado fue mejor', tal vez queda el resabio de que todo es así. Pero hay que destacar que había menos variedad de productos antes y menos patrones de comparación", agregó.

No hay que quitarle mérito a la enorme variedad de golosinas que hoy por hoy inundó los kioscos pero cabe hacerle un homenaje a todos aquellos dulces que fueron testigos de la infancia de toda una generación pero que, por alguna razón u otra, dejaron de producirse.

La vuelta es posible
Cuando más se extrañaban, volvieron las Tentaciones. Siempre estuvieron entre las favoritas y el público no se cansó de pedirlas. Trataron de imitarlas pero jamás volvieron a igualarlas. Por eso, Bagley relanzó sus deliciosas galletitas.

Laura Marinoni, jefe de Producto de Bagley, habló en Infobae.com sobre el regreso de las Tentaciones, ausentes en el mercado durante seis años.
"Se lanzaron en la década del '80, inicialmente en sus sabores chocolate y chocolate blanco y luego se extendió la línea a los sabores frutilla y limón", indicó y contó que "se dejaron de comercializar a fines del 2003 por decisiones estratégicas de la compañía".

Pero el público necesitaba "el gustito de lo tradicional" y Bagley le concedió el deseo relanzando las clásicas Tentaciones. "Respondimos a una gran cantidad de pedidos de consumidores que espontáneamente realizaban campañas en internet y de llamados a nuestro Servicio de Atención al Consumidor”.

"A mediados del 2008, la compañía decidió relanzar la marca. Al igual que en su lanzamiento original, en un primer momento se lanzaron los sabores chocolate y chocolate blanco y al poco tiempo, se sumaron los sabores frutilla y limón para completar la línea, con excelentes resultados en ventas", destacó Marinoni.

"El relanzamiento de Tentaciones mantuvo fiel su receta original que combina una exquisita mousse con su clásico botón de chocolate/jalea. Lo que sí hubo fue un aggiornamiento y un rediseño del packaging pero que mantuvo su practicidad que permite disfrutarlas en cualquier momento y lugar", finalizó.

Por su parte, Lorenzo consideró que hay marcas que son "lo suficientemente fuertes como para que con una buena acción de marketing reaparezcan, se aggiornen y vuelvan a estar en el concepto colectivo de la gente". "Muchas marcas siguen teniendo un importante recuerdo en la población", reflexionó.

Las golosinas que más se extrañan
La cajita Dorin's es de las más recordadas. Contenía las pastillitas con forma de corazones que venían en una lata en un primer momento y que luego se comercializaban con el packaging de cartón. Había de tres sabores: frutilla, limón, naranja y mandarina. Si bien en internet circula el rumor de que aún se encuentran en algunos barrios, lo cierto es que no es fácil encontrarlas.

El chicle Puaj no tenía término medio: o lo amaban o lo odiaban. De sabor súper ácido, muchos lo usaban para chascos pero estaban también quienes amaban el juguito que albergaba en su interior y que se descubría recién al morderlo. Bastante más popular era el Dinovo, un paquete con dos chicles con forma de huevos de dinosaurio.

Las mielcitas venían en "sachet" y había que abrirlas con la boca. Sin importar por cuántas manos habían pasado, chicos de todas las edades y clases sociales consumían tiras y tiras este empalagoso y pegajoso dulce de manzana, limón, frutilla y naranja.

Chocolates y demás dulces
Hay un antes y un después del famoso Nussini de Milka, la firma creada por Philippe Suchard en 1901. Los amantes de las obleas jamás olvidarán aquella golosina rellena con avellanas cubierta de chocolate, ideales para el recreo, después de jugar a la rayuela, el elástico o el ta-te-ti.

Los fanáticos del inolvidable producto podrán pedirlo a quienes viajen España, país donde se comercializa el "barquillo con crema (45%) de avellanas salpicado con trozos de avellana y cubierto con chocolate con leche (31%)".

Si de obleas hablamos, es imposible no hacer referencia al Grafitti, vendido como "el primero chocolate relleno de obleas rellenas" y muy similar al Kit Kat. En sus arbores el paquete era blanco pero luego se fue tiñendo con los colores flúo típicamente ochentosos. La golosina era, según la publicidad, ideal para regalarla al "flaco o la flaca que a vos te re copa" y su envoltorio "retro" quedará en el recuerdo de varias generaciones.

El alfajor Milkybar, cubierto con chocolate blanco y relleno de mousse, fue otra de las delicias difíciles de reemplazar. La marca que lanzó Nestlé también proponía una versión de esta golosina en tabletas de chocolate blanco que en la actualidad se siguen vendiendo en otros países del mundo como Inglaterra o España. Pero el alfajor, nunca más.

El chocolate Smack, con su clásico envoltorio naranja, era un hit entre grandes y chicos. Lo mismo sucedía con el Aero, que lo fabricaba Noel y era una barra de chocolate aireado que podía comprarse con unas pocas monedas y que hoy se sigue vendiendo en Europa. Cómo olvidar el Voley, muy parecido al Block de estos tiempos, con un paquete amarillo furioso que no pasa desapercibido en las góndolas.

"Yo era un Tuby que andaba solo por una ciudad soñada…", decía la pegadiza canción del comercial de los Tuby 3, a base de oblea bañada en chocolate, y el 4, de maní, caramelo y cubierto con chocolate negro. Más tarde salió el Tuby 5, de chocolate blanco, y el 6 en una publicidad que protagonizaba Diego Capusotto, aunque no tuvo la misma repercusión que los anteriores. Lo que nunca quedó claro es si alguna vez existieron las versiones 1 y 2.

En materia de alfajores, el Suchard es sin duda uno de los más recordados. Fue el primero en incorporar el relleno de mousse de chocolate en vez de dulce de leche. La golosina de envoltorio con colores psicodélicos -naranja, marrón y dorado- nació en 1984 y en la actualidad ya no se fabrica más.

La sabrosa barra de chocolate Lila Pause, a base de crema con frutillas, cereales y bañada en chocolate, no tenía desperdicio. En la publicidad aparecía la modelo Moira Gough comiendo la golosina mientras un grillo la molestaba. Hoy se vende una muy parecida pero con otro nombre y en España sigue su venta al igual que la del Nussini.

El alfajor Noel es uno de los emblemas de las golosinas que quedaron en el olvido. Venían dos versiones diferentes: uno en un packaging color violeta y el otro rojo. También está entre los inolvidables el alfajor Nesquik, basado en el polvo de cacao para chocolatadas que nació en 1948 en Estados Unidos.

Las galletitas Nips tenían forma de pequeños ositos y venían en vainilla, coco y chocolate. Duraron poco tiempo en las góndolas de los supermercados pero en los foros son unas de las golosinas más recordadas. Sus fanáticos aseguran que en México se consiguen en gustos como vainilla y canela.

Helados
Los helados se merecen un párrafo especial. El Patalín, nombrado el mejor helado de todos los tiempos, era de crema y pertenecía a Laponia, firma que significó el debut de Teto Medina en la televisión cuando aparecía en uno de sus comerciales.

Los de agua eran también muy pedidos en los carritos de las plazas: el Frutidedo, que tenía forma de mano y gustos frutales y el Esquimal, como un cilindro y gusto a chicle globo, eran un boom.

Entre las golosinas menos higiénicas de la historia se encuentra el Naranjú, inmune a la Gripe A y demás menesteres de estas épocas. Este pseudo helado (más precisamente jugo congelado) venía en una bolsita y valía apenas unos centavos. Pese a que era algo así como un pedazo de hielo con colorante, se consolidó como el helado más barato de todos los tiempos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

agradezco mucho que se pongan nostalgiosos con las golocinas de la decada del 80.soy hija de una gran persona que trabajo en noel.primeramenteen el area promotores y luego en el area vendedores.degraciadamente el fallecio con el dolor de que lo hayan dejado sesante,por que pensaba que iva a morir en noel .pero no fue asi.