martes, 2 de diciembre de 2008

Consumo en la crisis

Aseguran que la crisis ya cambia el perfil del consumidor argentino

Un estudio de la consultora CCR y el IAE de la Universidad Austral revela que los argentinos experimentaron un giro de 180 grados en sus hábitos de consumo como consecuencia de la crisis. El perfil pasó de demandante casi permanente a comprador racional que elige más y espera ofertas.

Los argentinos experimentaron un giro de 180 grados en sus hábitos de consumo como consecuencia de la crisis financiera internacional, ya que el perfil pasó de demandante casi permanente a comprador racional que elige más y espera ofertas. 

Ante este panorama, los expertos aseguran que se viene un "consumidor sobrecargado", que puede "exigir" antes de comprar. 

En este contexto, perciben un giro de 180 grados en el consumo de los argentinos que pasa de una fuerte presión sobre la demanda a una lógica de la oferta, es decir, consumidores con efectivo dispuestos a aguardar la mejor opción para comprar. 

Esta es una de las conclusiones a las que arribó un estudio de consumo realizado por la consultora CCR y el IAE de la Universidad Austral. 

El trabajo concluyó que la sensación de malhumor producto de la crisis financiera internacional afecta con mayor fuerza a los sectores de mayores recursos. 

El informe fue presentado por Guillermo Oliveto, CEO de CCR, y Guillermo D´Andrea, profesor del Area Comercial del IAE. 

"No todo está como a veces se lee desde las clases más altas", advirtió D´Andrea, al comenzar con su exposición. En este contexto, ambos ejecutivos perciben un giro de 180 grados en el consumo de los argentinos. 

"Pasa de una fuerte presión sobre la demanda a una lógica de la oferta, es decir, consumidores con efectivo dispuestos a aguardar la mejor opción para comprar", explicaron. 

A este nuevo mercado, señalaron los especialistas, deberán adaptarse los empresarios, obligados a apelar a la innovación y a estrategias ya experimentadas en otras crisis como la de 2001, pero también a buscar nuevas opciones. 

Según el estudio, aún no se percibe una reducción en el consumo de productos de marcas Premium, lo que indica que la gente está dispuesta a "mantener" su standard de vida hasta dónde le sea posible. 

En el peor de los panoramas, para 2009 se puede esperar que el consumo no se modifique, es decir que se estanque, con lo cual el escenario tampoco es desolador, dado que estaría 50 por ciento por sobre 2002 y 15 por ciento arriba del registrado en 1998, el mejor año de la convertibilidad. 

"No es esperable que la actividad caiga estrepitosamente", afirmaron los ejecutivos, aunque tampoco quisieron dar precisiones sobre lo que pueda suceder en el corto plazo, dado que el nivel de incertidumbre y desorientación "es muy grande aún". 

Sin embrago, alientan a los empresarios a buscar alternativas, tentar a los clientes y fidelizarlos. Brasil se mostró como una buena opción a seguir, en donde se ofrecen productos a créditos en las favelas. 

En la Argentina, lo cierto es que tanto quienes más tienen como los más pobres no se muestran dispuestos a ceder la vivienda, el trabajo, la salud, la educación y la inclusión (celular e Internet entre otros). 

Por ello, se espera que "gradualmente" se vaya aumentando la frecuencia en el consumo de ciertos productos (como restaurante, cines, salidas, esparcimiento), profundizándose una estrategia de "selección". 

Será tarea entonces de los empresarios saber cuándo, cómo, y dónde apuntar sus estrategias de ventas.

No hay comentarios: